viernes, 6 de mayo de 2011

El revólver (en tres intentos)

-No puedes tener un arma en la mano sin sentir el deseo de disparar... Recuerdo que no lo hice y años después salieron las balas por mi boca.


-Se apuntó con el revólver. Sabía que no estaba cargado pero el disparo fue tan sincero que día tras día se fue desangrando su alma.


-Pensé que si me acercaba, si cogía el revólver entre mis manos, entendería al fin el significado de la palabra muerte. Pero sólo comprendí lo que es la ira.


NiñoCactus

9 comentarios:

Elchiado dijo...

Uf, muy gráfico, muy directo. Un abrazo, niño-señor de pinchos-letrasafiladas

Elchiado dijo...

cuarto intento...

- En un disparo se acabará todo; será rápido, sin titubeos, el gesto de un solo dedo. Sin embargo, nunca pudo imaginar, que aquella bala fría se hubiese enamorado de sus labios y asomase despacio, encendida en pasión contenida, después de apretar el gatillo.



Creo que las letras están de regreso a su sitio, al menos de momento. Miles de gracias por ese abrazo coloca-letras. Va otro mío de camino.

Luisa Hurtado González dijo...

Lo cierto es que los tres me parecen excelentes.

Rosa dijo...

Distintas modalidades de disparo, con resultados diferentes. No se con cual quedarme. Me quedaré con los tres, o mejor dicho los cuatro.
Balacera de saludos.

Alejandro Rosas dijo...

"quisira tener un cuchillo pa`cuchillarme
quisiera tener un revólver pa` revolviarme"

canto tradicional chileno, de un desesperado por amor.


me encanta como enredas pocas palabras para contar historias tan extensas.

gracias

anis dijo...

dios mío es que las armas son malas!
no deberían existir

Torcuato dijo...

Están muy bien. Por elegir, creo que el segundo destaca.
Un abrazo.

NiñoCactus dijo...

(Por un fallo en blogger se borraron los últimos comentarios y estoy intentando rescatarlos de mi correo; mil gracias por seguir leyendo, y comentando, y aportando ideas).

Torcuato: Están muy bien. Por elegir, creo que el segundo destaca.
Un abrazo.

Gingerale dijo...

maravilloso.