Nadie, en varios kilómetros a la redonda, sabría decir su nombre.
Sentado en el asiento trasero de un taxi, con una molesta pieza metálica clavándose en su espalda, pensaba que era mejor así. Confiaba en su voluntad, pero sabía que encontrarse hoy una cara conocida haría todo mucho más difícil.
Prefería evitar remordimientos. Por eso, aún a sabiendas de que ese sería el último día de su vida, prefería encontrarse en esta tierra de infieles.
Al llegar al aeropuerto pagó el trayecto. No le importó dejar la vuelta del billete de 50 euros a un asombrado taxista que quizás, equivocadamente, pensó que ese iba a ser su día de suerte.
7 comentarios:
Ay... dime que saltaron todas las alarmas en el aeropuerto.
Un abrazo.
Eso eso... que duro!
Vaya mazazo, bien llevado el micro. Un abrazo.
Paradise Now... es cómo leer la sinopsis de esta fabulosa película. Duro, real, triste. Un abrazo
muy bueno, me gusta la manera de terminar...
un abrazo y felicidades por el aniversario!!
(vaya soltura la de Alberto por la radio, me emocionó:)
Qué bueno!me gusta mucho la manera de terminar...
un abrazo a los dos y felicidades por los 4 años!
(nos emocionamos escuchando a Alberto por la radio, qué porte, qué compostura...un profesional!:)
Muchas gracias por los comentarios!
Su: Casi seguro que si, lo que pasa es que en 100 palabras no cabía el final feliz ;)
Anita, Maita: Me gusta mucho que os haya movido algo al leerlo, muchas gracias por los comentarios!
Elchiado: Pues la verdad es que no estaba pensando en la película cuando lo escribí... pero sí que comparte temática, si.
Riquinho-e: Muchas gracias por el comentario, la verdad es que el último párrafo, desviando la atención del terrorista y centrándolo en una víctima me parecía interesante y efectivo (o eso espero!)
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