lunes, 5 de noviembre de 2012

Efectos colaterales

Mi vecino de enfrente adereza sus guisos cantando. Y lo hace fenomenal. Solo hay una pequeña pega: ahora las arias de Verdi me estriñen, y Turandot me produce gases.

4 comentarios:

Yoni Er Cafelito dijo...

está bien así, de cualquier modo. Comprendo que Verdi pueda estreñir un poco; en cambio, Puccini... es todo aire liberado, todo gas conquistando la atmósfera. La única ópera que he visto/escuchado en directo es Turandot: sin palabras.

un regalo del maestro Kraus

y este abrazo abrazo

Ester dijo...

Lo de Puccini lo entiendo ¿Pero Verdi?
Saltos y brincos, para que te mejores

NiñoCactus dijo...

El problema es que siempre que hace risotto entona a Verdi, y cuando prepara guisos con legumbres canta algo de Puccini. Y yo lo somatizo todo. No es que tenga algo en contra de ninguno de estos compositores. De hecho, al contrario, Nessun Dorma me corta la respiración (dejándome con todo el aire dentro, jojo).
Puntualizado queda.
Gracias por el regalo, niño nocturno, le envío abrazos a brazos llenos y sueños robados.
Ester, mil sonrisas de canguro y besos de saltamontes.

Unknown dijo...

Muy bueno.
¿Entonces era por eso por lo que nos sentíamos elevar del suelo al oír "Nessum Dorm"a o "Un bel di"? Lo más sublime con lo más prosaico, en pack.