En la casa de Julia las puertas juegan a cambiar de lugar.
A la hora de dormir, si el sofá todavía quiere que ella se quede un rato, todos los umbrales conducen al salón. Y por la mañana, cuando olvida lavarse los dientes antes de salir corriendo al trabajo, la entrada le lleva directamente al baño.
Es una suerte tener una casa así, porque si a la prisa se le hace tarde, siempre hay una taza de café esperando en la puerta de atrás.
NiñoCactus
Un honor poder colaborar con Inés Vilpi
¡Entren por la puerta de su blog!
No querrán marcharse, se lo aseguro.
10 comentarios:
Qué maravilla de puertas. Me encantó, pasaremos por la puerta trasera, si.
Un saludo.
Me encantaría una casa así, que cuando necesite aire se abran todas las puertas y me parezca estar en plena naturaleza.
El dibujo muy bueno, voy a ver ese blog ya que las puertas me llevan hacia el.
Un abrazo enomre!!!...te eché en falta en Madrid!
Así da gusto, yo quiero una casa como esta. Me pasaré por el blog de Ines...
Besos desde el aire a los dos
Unas cuantas puerta así nos vendrían bien en estos tiempos.
Me gustó
Besitos
Una casa de lo más práctico. Muy bueno, Niño.
Menos mal que en esa casa las puertas se ponen del lado de los habitantes, en la mía, por ejemplo, es al revés, cuando pueden se me cierran en la cara, je.
Buen relato.
Un abrazo.
HD
jo, qué casa más chula, con puertas que te cuidan y todo.
Quién tuviera ¿verdad?
Recuerdo una antigua publicidad que decía:
"Algún día, todos los electrodomésticos serán así".
Saludos.
Muy buen texto. Con una gran originalidad.Cada vez me gusta más visitar este espacio vuestro y si mi me permitís un poquito de los que lo visitamos.Es un gran placer perderse de vez en cuando por aquí.
Y aquí, creo que también comenté. O no.
O quizá comenté en casa de Inés y me estoy liando.
En cualquier caso me encató el dibujo y como le sacas tú el jugo con tus propuestas. Felicidades.
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