Lo curioso es que él mismo era
una rosa cuando quería. No necesitaba regalarme un ramo pues él se transformaba
en flor. Podía sentir sus caricias como pétalos frescos. Su aroma. No recuerdo
bien el momento, pero comenzó a marchitarse. Tal vez debí haberlo cuidado con
más mimo.
Entonces se convirtió en piedra.
Y de la misma manera que nunca hizo falta que me entregase flores, no fue
necesario que arremetiera con un arma para sufrir sus golpes. A veces roca, a
veces cuchillo, a veces pistola... ¿Lo entiende?... Y ahora me acaba de matar.
Se lo aseguro: estoy muerta.
NiñoCactus
7 comentarios:
Me gustó cuando lo leí en el concurso, es de los que no se olvidan.
Besos desde el aire
El cuerpo es el primer instrumeto del hombre. No se podía haber demostrado mejor.
Un saludo.
Postmorten me llamó la atención en un primer momento, pero no recuerdo a qué altura se me cayó. Está siendo de lo más entretenido. Aún lo es después de finalizado.
Un abrazo, NiñoCactus.
Me acuerdo de ese fina, me obligó a releerlo de nuevo.
Me gusta esto de dar nombre a los participantes.
Besitos
Me pareció un micro muy bien narrado, el nivel era muy alto y era difícil despuntar, pero este micro es de los que se me quedó en la niña de los ojos. Abrazos, Alberto.
Hola, vecino de Salamanca!
Entro por primera vez (recomendación de A.Ruá, que todo hay que decirlo).
Y te felicito, buena pluma, sí señor. Entraré más por aquí. Un saludo.
Cómo cambia la gente! Cómo cambian las relaciones con el tiempo! De miel a hiel... Tenés una seguidora más, tus micro-maravillas se me han quedado en el baúl de cosas importantes, junto con el principito.
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