La besé cuando se encontraba dormida y permaneció dormida. La besé cuando estaba despierta y permaneció despierta. Probé a besarla al sonreír o al llorar, y siguió igual de luminosa o llena de lágrimas. Entonces, probé a no besarla y desapareció.
NiñoCactus
16 comentarios:
Qué tendrán los besos que si no los tienes los hechas de menos...Pero si tienes muchos, no los sueles apreciar.
Niño Cactus siempre te leo con gusto, me haces soñar.
Saludos desde el aire.
Gran belleza en este micro. Me ha gustado mucho, NiñoCactus.
Un abrazo.
Está claro que funcionaban.
madre mía...
Un blog precioso, lleno de textos maravillosos.
Un saludo niño cactus :)
Se percibe gran sensibilidad en tus textos. Me gusta tu forma de escribir.
Saludos.
joder, es precioso
Es chulísimo. Y además una verdad como un templo...
Me encanta el micro pero, te confieso, que me ha atrabado el título, me parece redondo. Felicidades
Saludillos
Sólo usted para poder explicarnos algo tan sencillamente complejo.
Y aún así tengo dudas... Un abrazo
Besos...no desaparezcas!
Es precioso, como un beso...
Gracias por visitar mi blog.
Yo siempre regreso a este... a por más besos...
Saludos,
A.
Si es que no se puede dejar de darlos... voy a mandarte unos cuantos jajaja. ¡Ahí van!.
Precioso, como siempre.
Precioso, de verdad... por si acaso no me beses no sea que luego desaparezcas tu ;)
Creemos que no sirven de nada los besos, pero no es así... Yo te mando también muchos besos para que no desaparezcas.
una joya
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